ALTAS HORAS
A horas altas de la noche
a la noche de altas horas
están tocando en tu puerta
tocan tocan tocan tocan.
Están tocando a la puerta
a horas altas de la noche
y es la sangre la que toca.
Toca la puerta la sangre
como un impreciso broche
como ida como loca.
Para que no se desangre
el sueño en que andas sumido
toca la sangre a la puerta
toca toca toca toca.
Y tú ausente confundido
la sangre no se equivoca
sueñas con venas abiertas
por eso toca a la puerta
como ida como loca.
Es la sangre de tu sangre
la sangre de un tiempo ido
es la que toca a la puerta
del corazón a la boca.
Es la sangre que ha venido
a horas altas de la noche
con una señal de alerta
la sangre que te ha parido
que ahora toca, toca, toca,
toca insistente la puerta.
Que no le llegue el reproche
de que en el sueño sumido
con las dos venas abiertas
dando tumbos confundido
a horas altas de la noche
no quiso tocar la puerta.
Por eso es que toca y toca
para saberte advertido
del corazón a la boca
a horas altas de la noche
toca toca toca toca.
Del poemario inédito: “Voces”
Imagen; Edvard Munch,
No hay comentarios:
Publicar un comentario