DERIVA
Cuando deja la tarde
de luchar y se dobla
y le cierra los ojos
en el borde mismísimo
en el alma mismísima
en las manos de nieve.
Un desfile en penumbra
de pájaros gorriones
piándole en la ingle
para saciar la sed.
Un caracol sonámbulo
sigiloso se arrastra
por la orilla del sueño;
un enjambre estrellas.
Y el alba que resurge
sin norte, dando tumbos;
las últimas noticias,
el sabor del café,
el sabor del café,
el eco del olvido.
Imagen: Salvador Dalí.